Este artículo que publicamos a continuación, nos lo ha hecho llegar nuestro colega cubano Raúl Cardona (http://www.elpuntoge.co.nr/, http://www.polilla.co.nr/ y http://www.cuba-metal.com), y nos ilustra acerca del cierre de un conocido local destinado a espectáculos de rock en aquél país hermano. Raúl nos denuncia una especie de persecuta de parte de las autoridades para privar a las audiencias juveniles de la posibilidad de contar con un importante espacio para disfrutar de eventos relacionados con la música...:"Maxim Rock, otra vez cerrado.
Por Tony González.
Durante la primera semana de febrero, las autoridades municipales de Higiene y Epidemiología volvieron al Maxim, y después de ponerle una multa de 300 pesos a su directora MaxYuris Ávila, volvieron a cerrar el local, por lo que en esa semana no se pudieron dar los conciertos previstos y tampoco se efectuaron las otras actividades que estaba programado realizarse allí, como la audición de Rap en horas de la tarde, y los ensayos infantiles para la Peña Comunitaria Zapato de Meñique.
Hay ciertos puntos que queremos aclarar después de haber hecho una sucinta labor investigativa, para tratar de dar las informaciones lo más leales a la realidad. En primer lugar, no cabe duda que los chicos de Higiene y Epidemiología no llegaron al Maxim de casualidad, sino inspirados por algunas quejas de vecinos. En otras informaciones dadas a través de Cuba-Metal la semana pasada, se hablaba de cientos de firmas de vecinos pidiendo que se cerrara el local. No hay tales "cientos de firmas", pues las firmas no son tantas, y además, se tomaron desde antes que comenzaran las actividades de conciertos, por lo que el hecho de que hayan llegado allí, impactados por la "bulla", no es mas que una falacia de ellos mismos.
Solamente son tres los vecinos que realmente se han manifestado en contra de que el Maxim esté ahí, del resto, si bien no les gusta mucho la idea, no están en posición combativa contra el local. Una de esas vecinas le hizo una mañana un escándalo a los trabajadores del Maxim Rock, acusándolos de todo lo que se le ocurrió, sin tener en cuenta que partes de su propia casa están pintadas con la misma pintura rojo oscuro utilizada por los constructores a cargo de la remodelación del centro recreativo. En otra oportunidad, de esa misma vivienda le lanzaron un puñado de sal a uno de los muchachos del equipo de Tendencia. En ambos casos, no hubo respuesta por parte de los rockeros, para tratar de evitar un problema mayor.
Otras opiniones, fundamentalmente emitidas por visitantes al Maxim, plantean que si en vez de ser el Maxim Rock, fuera el Maxim Salsa, el Maxim Rumba, el Maxim Son e incluso el Maxim Reguetón, la mayoría de los vecinos no estuvieran tan quejosos, y algunos hasta orgullo sentirían de ver desfilar a "músicos famosos". Con esas opiniones estamos muy de acuerdo, porque está claro que realmente la política cultural del estado cubano durante más de cuarenta años ha sido contraria al rock, y más de una generación de cubanos se ha criado bombardeados por la propaganda abierta y subliminal (que aun existe) de que los rockeros somos todos unos drogadictos, pervertidos sexuales y ajenos a la política del país. Ahí está el resultado.
En el caso particular del Maxim, llama poderosamente la atención la posición adoptada por el Consejo Popular de esa zona, representado en este asunto por su Vice Presidenta, conocida en el barrio por Lalita, quien el pasado jueves acompañó a los muchachos de Higiene, y quien con unos modales que no se caracterizan por su diplomacia, exigió que se cumplieran las normas porque ella representa al gobierno. A mi me asombra que, siendo real que los vice presidentes de todos los Consejos de Cuba representan al gobierno, la compañera no tenga presente que el Maxim Rock fue el resultado de una inversión de miles de dólares y otros miles de pesos que no pudo hacerse sin estar aprobada a niveles ministeriales, y se realizó con un esfuerzo muy grande en medio de las dificultades económicas que todos conocemos y vivimos, agravados por los ciclones que desde el 2007 nos atacan con especial ensañamiento. Al parecer tampoco ha concientizado que, de cerrar el Maxim, se van a quedar sin trabajo ni salario un aproximado de 170 personas, y que eso va totalmente contra la política estatal, que esta tratando de aumentar los puestos de trabajo y quiere lograr la inserción laboral de ese ejercito de desempleados que, en la mayoría de los casos, no quiere trabajar. Pues bien, aquí hay más de un centenar de personas que sí quieren trabajar y no pueden, por que una representación del Consejo Popular ha decidido lanzar una campaña contra el Maxim Rock. Y me pregunto: ¿A quién representa en realidad el Consejo Popular?
Ahora, no todo es culpa de las autoridades. Cuando los trabajadores de Higiene llegaron a inspeccionar el Maxim Rock, detectaron que faltaban algunos documentos necesarios para que el local pudiera abrir sus puertas al público. Se especula que esos documentos nunca los han pedido en otros lugares donde se ofrece música en vivo, y que en este caso lo han hecho para tener un motivo de cerrar, pero no habiendo forma de comprobarlo, no queda más remedio que gestionarlos y, después que estos estén en poder de la dirección del local, reabrirlo al público. También sabemos que los vecinos de otros centros nocturnos más bullangueros, han protestado sin resultado. ¿Por qué será que aquí si les han hecho caso casi de inmediato?
Cada vez que se presentan estas personas al Maxim, se siente que van con mala voluntad, ensañamiento, y deseos manifiestos de buscar el más mínimo pretexto para aplicar todo el peso de la ley, por eso, en primer lugar, hay que tener todos los documentos y permisos, para no dar el motivo. Estoy muy convencido que una vez que se haya dado este paso, trataran de encontrar nuevos resquicios donde apoyarse para cerrar una vez más el local, pero esta es una lucha legal, y además, el Maxim Rock no genera dinero suficiente como para sobornar a las autoridades, como se hace en otras partes, ni tiene la intención de hacerlo.
Hay que hacer un aparte especial para aquellos que no son rockeros o no han ido al Maxim todavía. A diferencia de muchos otros centros nocturnos que no mencionaré porque en realidad no vienen al caso, el Maxim cierra sus puertas a las 12 de la noche, incluso el sábado, no es lugar donde haya prostitución y mucho menos drogadicción. La entrada tiene un precio de cinco pesos moneda nacional, para favorecer a los estudiantes y posibilitar que ningún interesado quede fuera. Solo hay conciertos de jueves a sábado, aunque se piensa comenzar a abrir los miércoles también, y los domingos alternos se hacen peñas comunitarias, una vez para niños, y otra vez para los amantes de la década prodigiosa. La dirección del centro está muy interesada en integrarse a la comunidad, e incluso ha prestado sus locales para que el propio Consejo realice actividades. Ni siquiera hay oferta de bebidas o cigarros, ya que aun no se han gestionado las licencias gastronómicas. En fin, es un lugar de sano esparcimiento pensado netamente para los jóvenes.
En todo momento, el Instituto Cubano de la Música y el Ministerio de Cultura, han apoyado al Maxim, y han tratado de solucionar los problemas lo más pronto posible. Las autoridades de Higiene y Epidemiología y el Consejo Popular están en el bando contrario, creando problemas y no soluciones. Han actuado además de manera poco clara, y el ejemplo más obvio se desprende del planteamiento de las autoridades de Higiene quienes al llegar al Maxim el jueves 5 de febrero, dijeron que el viernes 31 de enero fueron a casa de varios vecinos mientras la banda Extraño Corazón daba su concierto, para medir los niveles de ruido. Sin embargo, no informan exactamente donde fueron, ni muestran el aparato con que midieron el pretendido ruido, ni se presentaron al Maxim esa noche para demostrar los resultados de su trabajo, ni mostraron un documento probatorio de estas afirmaciones, y cualquier rockero sabe que Extraño Corazón es una banda no precisamente escandalosa. ¡Qué raro que hasta el jueves siguiente no se presentaran con esta historia!
Mientras no se consigan los documentos pertinentes, ni se haga la prueba de decibelios que demuestre que el local está por debajo del nivel de ruido permisible por las autoridades (prueba que ya se hizo de manera extraoficial, demostrando que esta muy por debajo del nivel autorizado), y está se reciba en blanco y negro, el Maxim no debe reabrir sus puertas. De lo contrario, sus trabajadores tendrán que recibir continuas "visitas" y entrar en careos y discusiones innecesarias con personas que se han tomado el cierre del lugar como una cruzada, y llegan a sus puertas con modales autoritarios que nadie tiene porque aguantar, y solo por educación y por los deseos de que no se pase a un plano más desagradable hace que sean soportados. También esta situación de continuo abrir y cerrar según los hechos, hace que se pierda la credibilidad y va creando un clima de falta de prestigio en la Agencia Cubana de Rock, y de inseguridad en músicos y público, los primeros que no saben si van a actuar y cobrar su salario, y los segundos porque no saben si van a ir por gusto hasta el Maxim.
Hasta el momento son estos los análisis que se pueden hacer teniendo en cuenta los hechos ocurridos. Esperamos que esta guerra no la ganen los que odian y destruyen, pues de ser así, todos los que hemos encontrado un amparo en el Maxim estamos simplemente jodidos, y entonces le va a tocar a cada uno tomar la decisión que más se ajuste al problema que se va a crear. Espero que no sea el silencio."
Cada vez que se presentan estas personas al Maxim, se siente que van con mala voluntad, ensañamiento, y deseos manifiestos de buscar el más mínimo pretexto para aplicar todo el peso de la ley, por eso, en primer lugar, hay que tener todos los documentos y permisos, para no dar el motivo. Estoy muy convencido que una vez que se haya dado este paso, trataran de encontrar nuevos resquicios donde apoyarse para cerrar una vez más el local, pero esta es una lucha legal, y además, el Maxim Rock no genera dinero suficiente como para sobornar a las autoridades, como se hace en otras partes, ni tiene la intención de hacerlo.
Hay que hacer un aparte especial para aquellos que no son rockeros o no han ido al Maxim todavía. A diferencia de muchos otros centros nocturnos que no mencionaré porque en realidad no vienen al caso, el Maxim cierra sus puertas a las 12 de la noche, incluso el sábado, no es lugar donde haya prostitución y mucho menos drogadicción. La entrada tiene un precio de cinco pesos moneda nacional, para favorecer a los estudiantes y posibilitar que ningún interesado quede fuera. Solo hay conciertos de jueves a sábado, aunque se piensa comenzar a abrir los miércoles también, y los domingos alternos se hacen peñas comunitarias, una vez para niños, y otra vez para los amantes de la década prodigiosa. La dirección del centro está muy interesada en integrarse a la comunidad, e incluso ha prestado sus locales para que el propio Consejo realice actividades. Ni siquiera hay oferta de bebidas o cigarros, ya que aun no se han gestionado las licencias gastronómicas. En fin, es un lugar de sano esparcimiento pensado netamente para los jóvenes.
En todo momento, el Instituto Cubano de la Música y el Ministerio de Cultura, han apoyado al Maxim, y han tratado de solucionar los problemas lo más pronto posible. Las autoridades de Higiene y Epidemiología y el Consejo Popular están en el bando contrario, creando problemas y no soluciones. Han actuado además de manera poco clara, y el ejemplo más obvio se desprende del planteamiento de las autoridades de Higiene quienes al llegar al Maxim el jueves 5 de febrero, dijeron que el viernes 31 de enero fueron a casa de varios vecinos mientras la banda Extraño Corazón daba su concierto, para medir los niveles de ruido. Sin embargo, no informan exactamente donde fueron, ni muestran el aparato con que midieron el pretendido ruido, ni se presentaron al Maxim esa noche para demostrar los resultados de su trabajo, ni mostraron un documento probatorio de estas afirmaciones, y cualquier rockero sabe que Extraño Corazón es una banda no precisamente escandalosa. ¡Qué raro que hasta el jueves siguiente no se presentaran con esta historia!
Mientras no se consigan los documentos pertinentes, ni se haga la prueba de decibelios que demuestre que el local está por debajo del nivel de ruido permisible por las autoridades (prueba que ya se hizo de manera extraoficial, demostrando que esta muy por debajo del nivel autorizado), y está se reciba en blanco y negro, el Maxim no debe reabrir sus puertas. De lo contrario, sus trabajadores tendrán que recibir continuas "visitas" y entrar en careos y discusiones innecesarias con personas que se han tomado el cierre del lugar como una cruzada, y llegan a sus puertas con modales autoritarios que nadie tiene porque aguantar, y solo por educación y por los deseos de que no se pase a un plano más desagradable hace que sean soportados. También esta situación de continuo abrir y cerrar según los hechos, hace que se pierda la credibilidad y va creando un clima de falta de prestigio en la Agencia Cubana de Rock, y de inseguridad en músicos y público, los primeros que no saben si van a actuar y cobrar su salario, y los segundos porque no saben si van a ir por gusto hasta el Maxim.
Hasta el momento son estos los análisis que se pueden hacer teniendo en cuenta los hechos ocurridos. Esperamos que esta guerra no la ganen los que odian y destruyen, pues de ser así, todos los que hemos encontrado un amparo en el Maxim estamos simplemente jodidos, y entonces le va a tocar a cada uno tomar la decisión que más se ajuste al problema que se va a crear. Espero que no sea el silencio."
Muchas gracias entonces a nuestro colega Raúl por hacernos llegar este interesante comentario...
Y retornando a Argentina, esta noche y mañana por la noche se producirán los dos primeros conciertos de los suecos IN FLAMES en Buenos Aires. Estaremos presentes hoy viernes, realizando la cobertura correspondiente, en lo que será el debut de estos creadores del sonido Gothemburg. La cita será en The End Live ambas noches. Los invitados para hoy son Nueva Etica, Nafak y los brasileros Error. Y para mañana Cerdo, Akrida, Cabra y Hate Fusión.
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Viernes 20 de febrero: FOR EVERNESS en Chivilcoy, luego de su exitoso 2008 tocando como invitados de WITHIN TEMPTATION, EPICA y NIGHTWISH en sus shows en Argentina... Bar Cultural Los Indios, San Martín 32, Chivilcoy.
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Estamos sorteando una entrada para MORBID ANGEL (5 de marzo en El Teatro Flores), gentileza de Icarus Music (gracias Marcela!!); otra para STORY OF THE YEAR (4 de marzo en Súper Rock), y dos más para el HEAVY METAL FEST (TREN LOCO, LETHAL, IMPERIO, MASTIFAL, JERIKO, AVERNAL, BETRAYER), 7 y 8 de marzo en Súper Rock, gentileza de 4G Producciones (gracias Lucy!!). Para participar, mandar nombre y n° de documento a oxidometal@hotmail.com.
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OXIDO
Casi 14 años de historia en la radio...
Domingos 11 p.m. hora de Buenos Aires.
Por antena: frecuencia 103.7 Mhz Radio Local de Chivilcoy.
Para escuchar por internet: http://radiolocalfm.com.ar/.
Contactos: 02346-424502 ó 02346-15579488
MSN: oxidometal@hotmail.com.
Interesante, pero no puedo estar de acuerdo con el artículo. Si encontraron problemas de sanidad, entonces no hay escusas.
ResponderEliminarSólo espero que puedan obtener los permisos correspondientes acorde a la ley cubana y puedan seguir funcionando, pero hay que ser objetivos, si se encontraron problemas y el local no cumple con la normativa no hay más vuelta que darle.