martes, 7 de mayo de 2013

Llueven lágrimas de sangre... JEFF HANNEMAN Q.E.P.D.


JEFF HANNEMAN
31/01/1964-02/05/2013
Llueven lágrimas de sangre desde un cielo lacerado.
Estas breves palabras no intentan ser un detalle pormenorizado de la vida y obra de Jeff Hanneman (la cual está ampliamente documentada), ni tampoco pretenden adentrarse en las causas de su muerte, la que ya han generado controversia en toda la web (con respecto a que si la picadura de una araña puede o no llevar a la fascitis necrotizante). Simplemente pretenden rendirle un humilde homenaje a un pilar del Thrash, a alguien que logró penetrar los corazones de metaleros de todo el mundo, durante los últimos treinta años, a base de sus riifs y sus solos frenéticos. Jeff Hanneman junto a Kerry King, formaron la pareja de guitarras más asesina de esos últimos treinta años, y me atrevo a decir que su status estaba a la altura de esa otra mítica pareja que fueron Glenn Tipton y K.K. Downing.
Su carrera siempre estuvo ligada a Slayer, no hizo trabajos solistas ni colaboró con otros artistas. Influenciado por el Punk y el Heavy Metal por partes iguales formó Slayer (junto a Tom Araya, Kerry King y Dave Lombardo) a principios de los ´80. Fue el creador de temas hoy fundamentales en la historia del Metal, como el polémico "Angel of Death" o "Seasons in the Abyss", canciones que jamás faltaron en los shows. Con el álbum Reign in Blood llegó el reconocimiento; media hora de esquizofrenia convertida en sonido.
De ahi en más, una carrera ascendente, hoy no hay banda extrema (y no tanto) que no acuse la influencia de Slayer.
Muchos recordamos sus shows en Argentina, sobre todo aquel Monsters Of Rock de 1994, junto a Kiss y Black Sabbath, con Hermética y Gatos Sucios como el aporte de bandas nacionales. Allí estaba Jeff. O en Obras, con su guitarra que parodiaba el logo de cerveza Heinekken.
La noticia sorprendió al mundo de la música. Los últimos reportes informaban que Jeff se estaba recuperando. Nadie esperaba el trágico desenlace. No hubo intervención divina. Quizá es cierto que Dios nos odia a todos.
Hoy el futuro se ve incierto, aparentemente la banda definitivamente va a seguir sin su rubio guitarrista, reemplazado por Gary Holt, Pat O´Brien o quizá otro... Lo cierto es que para muchos Slayer sin Hanneman ya no será igual.
Sobran las palabras; cada vez que suene el enfermizo riff de "Raining Blood", estaremos recordando a aquel hombre que con sus canciones sobre muerte, genocidios, guerras, nazismo y horror hizo, paradójicamente, de este mundo pintado de sangre, un lugar mejor... y a nosotros nos trajo un poco de felicidad.

Por Santiago Bennasar, para OXIDO.-

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Traductor