Dark Tranquillity 20-06-08 – El Teatro de Flores
Para cuando llegué al recital a eso de las 19:40 estaba tocando Cerdo (carajo!!! me perdí Satan`s Night Out), una banda que intenta un death-melódico al estilo In Flames, sin embargo la única referencia que puedo darles ya que pareció una bola de sonido, volumen muy fuerte, donde la bata estaba al palo al igual que la voz, quedando rezagados los demás instrumentos haciendo muy difícil entender los temas y mucho menos encontrar algún riff o melodía. Lo mismo ocurrió con Embodiment.
A eso de las 21:25 se corre el telón y ante unas 800 personas aparece Dark Tranquillity con sus 6 integrantes (nada de pistas grabadas prescindiendo del tecladista), iniciando con Terminus de su última y aclamada placa “Fiction”, se notó a un Mikael Stanne (voz) y Michael Nicklasson (bajo) entregados al público desde el minuto cero. Los mejores temas se iban sucediendo “The Lesser Faith”, “Damage Done”, “The Treason wall”, “Lost to Apathy”, recorriendo casi toda su discografía. En ese tiempo el amor del público hacia la banda se hizo sentir, lo cual fue muy bien recibido por todos sus integrantes construyendo una sinergia típica del público argentino con sus bandas preferidas en pos de un espectáculo tanto arriba como abajo del escenario. A esta altura el recital tenía todos los ingredientes necesarios para llegar a ser un gran espectáculo: gente coreando todos los temas, sonido impecable, músicos ultraprofesionales, lista de temás ideal y una banda dando todo de si. A las 22:40 salen del escenario para retornar casi instantáneamente y hacer ahora si los últimos 2 temas, un final a toda orquesta con “Final Resistance” y a dormir todos más que contentos. Para cerrar: abundaron rostros repletos de satisfacción, parte de los músicos se quedaron saludando a los fans que estaban contra la baranda en un gesto de cordialidad. Un recital que sobrepasó mis expectativas…de esos que te vuelven el alma al cuerpo. En palabras de Mikael S. “This is a good night”, lo cual no es poco viniendo de la boca de un sueco.
José María, para OXIDO.
21 de junio de 2008.
Para cuando llegué al recital a eso de las 19:40 estaba tocando Cerdo (carajo!!! me perdí Satan`s Night Out), una banda que intenta un death-melódico al estilo In Flames, sin embargo la única referencia que puedo darles ya que pareció una bola de sonido, volumen muy fuerte, donde la bata estaba al palo al igual que la voz, quedando rezagados los demás instrumentos haciendo muy difícil entender los temas y mucho menos encontrar algún riff o melodía. Lo mismo ocurrió con Embodiment.
A eso de las 21:25 se corre el telón y ante unas 800 personas aparece Dark Tranquillity con sus 6 integrantes (nada de pistas grabadas prescindiendo del tecladista), iniciando con Terminus de su última y aclamada placa “Fiction”, se notó a un Mikael Stanne (voz) y Michael Nicklasson (bajo) entregados al público desde el minuto cero. Los mejores temas se iban sucediendo “The Lesser Faith”, “Damage Done”, “The Treason wall”, “Lost to Apathy”, recorriendo casi toda su discografía. En ese tiempo el amor del público hacia la banda se hizo sentir, lo cual fue muy bien recibido por todos sus integrantes construyendo una sinergia típica del público argentino con sus bandas preferidas en pos de un espectáculo tanto arriba como abajo del escenario. A esta altura el recital tenía todos los ingredientes necesarios para llegar a ser un gran espectáculo: gente coreando todos los temas, sonido impecable, músicos ultraprofesionales, lista de temás ideal y una banda dando todo de si. A las 22:40 salen del escenario para retornar casi instantáneamente y hacer ahora si los últimos 2 temas, un final a toda orquesta con “Final Resistance” y a dormir todos más que contentos. Para cerrar: abundaron rostros repletos de satisfacción, parte de los músicos se quedaron saludando a los fans que estaban contra la baranda en un gesto de cordialidad. Un recital que sobrepasó mis expectativas…de esos que te vuelven el alma al cuerpo. En palabras de Mikael S. “This is a good night”, lo cual no es poco viniendo de la boca de un sueco.
José María, para OXIDO.
21 de junio de 2008.
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